La tendencia en el consumo de vino en alimentación ha cambiado en
2013, con una caída en volumen pero un aumento en valor al haber subido
significativamente el precio medio de compra. Esta subida de precios se
ha dado principalmente en el vino sin denominación de origen, el que se
consume principalmente en los hogares españoles y que sigue siendo, no
obstante, el más económico.
Según datos del Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), un mes
de noviembre negativo incrementa el descenso del volumen de vino
consumido en alimentación (-3,4%) durante los once primeros meses de
2013, mientras que el gasto aumenta un 3,5%, gracias al aumento del
precio medio.
El precio medio aumenta en todos los productos, aunque destaca el experimentado por el vino tranquilo (blancos, rosados y tintos con contenido alcohólico entre 9º y 14.5º, generalmente secos y con un proceso de elaboración parecido) sin denominación de origen (+12,7%) y el de los cavas (+6,9%).
El vino más consumido en volumen es el vino tranquilo sin denominación de origen (55% del volumen total), mientras que en valor es el vino tranquilo con denominación (47,5% del gasto total).
El precio medio aumenta en todos los productos, aunque destaca el experimentado por el vino tranquilo (blancos, rosados y tintos con contenido alcohólico entre 9º y 14.5º, generalmente secos y con un proceso de elaboración parecido) sin denominación de origen (+12,7%) y el de los cavas (+6,9%).
El vino más consumido en volumen es el vino tranquilo sin denominación de origen (55% del volumen total), mientras que en valor es el vino tranquilo con denominación (47,5% del gasto total).
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