domingo, 17 de noviembre de 2013

Estados Unidos decide eliminar definitivamente las grasas trans

La F.D.A. (Food and Drug Administration), la Agencia Alimentaria estadounidense, propuso el pasado jueves una serie de medidas para eliminar prácticamente las grasas ‘trans’ artificiales en la oferta de productos de alimentación, lo que supondría la culminación de tres décadas de esfuerzos en salud pública abogando para que el gobierno tome medidas contra este tipo de grasas.

Las grasas trans artificiales —que de acuerdo con infinidad de estudios suponen una importante contribución a las enfermedades del corazón en los Estados Unidos al obstruir las arterias— ya se han reducido significativamente a lo largo de los últimos años en muchos de los alimentos a la venta en este país, según informa The New York Times.

Sin embargo, todavía se esconden en las formulaciones de muchos productos altamente populares, como los glaseados en donuts y otros artículos de pastelería, las palomitas para hacer en microondas, pasteles envasados, pizzas congeladas, margarinas y cremas para el café. Prohibir este tipo de utilización por completo podría prevenir hasta 20.000 ataques al corazón y 7.000 muertes por enfermedades del corazón cada año, de acuerdo con las estimaciones de la F.D.A.

Según declaraciones a The New York Times de Marion Nestle , profesora del departamento de nutrición, estudios alimentarios y salud pública en la Universidad de Nueva York, lo que la F.D.A. ha propuesto en definitiva es que los aceites parcialmente hidrogenados, la fuente de grasas trans, dejen de ser "generalmente reconocidos como seguros."

Eso significaría que las empresas tendrían que demostrar que estos aceites son seguros para la alimentación, lo que en la práctica supondrá un verdadero obstáculo ya que la literatura científica demuestra abrumadoramente todo lo contrario. De hecho, el Institute of Medicine
(Instituto de Medicina) —organización independiente, sin ánimo de lucro que proporciona asesoramiento imparcial y fidedigno a responsables políticos y ciudadanos— ha concluido que no existe un nivel seguro para el consumo de grasas trans, según cita la FDA citó en el razonamiento de sus conclusiones.

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